Rehabilitación energética y CAE: cuando el ahorro se convierte en retorno económico
La rehabilitación energética de edificios ya no es solo una cuestión de confort o sostenibilidad. Hoy, gracias a los Certificados de Ahorro Energético (CAE), las actuaciones de mejora pueden traducirse también en un retorno económico directo para comunidades de propietarios y promotores.
Cambiar ventanas, mejorar el aislamiento o modernizar los sistemas térmicos permite reducir el consumo energético… y ahora, además, certificar ese ahorro y monetizarlo.
¿Qué son los CAE y por qué son una oportunidad real?
Los Certificados de Ahorro Energético permiten transformar el ahorro energético conseguido tras una actuación de rehabilitación en un valor económico, medido en kWh y reconocido oficialmente.
Ese ahorro certificado puede:
- Descontarse del coste total de la obra.
- Percibirse como ingreso económico para la comunidad.
- Complementar subvenciones públicas y mejorar la viabilidad del proyecto.
En otras palabras: el ahorro deja de ser solo teórico y pasa a tener un valor tangible.
Actuaciones habituales que generan CAE en comunidades
Muchas de las obras más comunes en edificios residenciales son perfectamente válidas para la obtención de CAE, siempre que cumplan los requisitos técnicos establecidos. Entre las más frecuentes se encuentran:
- Sustitución de calderas centrales por bombas de calor o aerotermia.
- Mejora del aislamiento térmico en fachadas y cubiertas.
- Renovación de ventanas y carpinterías.
- Instalación de energía solar, tanto térmica como fotovoltaica.
- Sustitución del alumbrado de zonas comunes por iluminación LED.
Estas actuaciones están recogidas en las fichas estandarizadas del MITECO, lo que permite una tramitación más ágil del certificado.
Ejemplo orientativo: rehabilitación en un edificio residencial
Imaginemos una comunidad de propietarios con 30 viviendas que decide acometer una rehabilitación energética integral:
- Aislamiento de fachada mediante sistema SATE.
- Sustitución de caldera central por aerotermia.
- Renovación del alumbrado de zonas comunes.
El ahorro energético anual conseguido asciende a 180.000 kWh.
Tomando como referencia un precio medio del CAE de 0,094 €/kWh, el retorno económico sería:
- 16.920 € en ahorro certificado.
Este importe puede destinarse a reducir la derrama de los vecinos o a financiar parte de la inversión inicial.
Cómo se gestiona un CAE en una comunidad de propietarios
El proceso para obtener un CAE es sencillo cuando se planifica desde el inicio:
- Acuerdo en junta, aprobando la obra y la cesión del ahorro energético.
- Ejecución de la actuación, conforme a los requisitos técnicos.
- Verificación del ahorro por un agente acreditado.
- Registro oficial del CAE.
- Monetización, ya sea como ingreso o descuento económico.
La clave está en integrar el CAE en la planificación del proyecto, no tratarlo como un trámite posterior.
CAE y subvenciones: compatibles y complementarios
Una de las grandes ventajas del sistema CAE es su compatibilidad con ayudas públicas, como los fondos Next Generation o subvenciones autonómicas.
El resultado: proyectos más viables y mejor aceptados por los vecinos.
CAE: una palanca clave para la rehabilitación energética
Los Certificados de Ahorro Energético aportan beneficios claros a las comunidades de propietarios:
- Reducen el coste final de las obras.
- Mejoran la eficiencia y el confort del edificio.
- Revalorizan las viviendas.
- Generan retornos económicos asociados al ahorro.
- Contribuyen a la reducción de emisiones y al cumplimiento de objetivos energéticos.
El papel de Vivendio como Sujeto Delegado
En Vivendio (Grupo Aconser) acompañamos a comunidades y promotores durante todo el proceso del CAE:
- Analizamos el potencial de ahorro certificable.
- Coordinamos la verificación y la tramitación administrativa.
- Gestionamos el registro y la monetización del certificado.
- Simplificamos la documentación y maximizamos el retorno económico.
Porque una rehabilitación bien planteada no solo mejora edificios: mejora decisión